Crónica Media Maratón de Mérida 2022. Aligerando el paso

      Justo tres años después de mi última participación en esta carrera tocaba volver a tomar contacto con esta competición aprovechando su nuevo recorrido y para también probar su reciente horario nocturno. Además esta Media Maratón de Mérida siempre tiene mucha participación y es un gustazo ver a los amigos y disfrutar del ambiente de las carreras.

Entrada al Puente Romano, km 2. Foto: Organización

     En los días previos tenía un dilema sobre cómo enfocar la carrera teniendo en cuenta que dos semanas después está la Maratón de Badajoz. Las opciones eran ser conservador, corriendo como muy rápido a ritmo de maratón, o simplemente competir y disfrutar exprimiendo las fuerzas. Pero teniendo en cuenta que la preparación de la maratón ha sido corta, ya que estoy corriendo desde enero después de la lesión, y que de una forma u otra no iba a llegar en plenas condiciones, opté por competir y no guardar nada. También sería una forma de testear en qué punto me encontraba.

     A Mérida llegaba bien de tiempo, después de comer y tras una jornada matinal de trabajo. Caliento durante media hora por el parque del río, hace frío y es necesario entrar bien en calor. Después una foto con los compañeros del club y me dirijo al primero de los cajones para tomar la salida.

Dentro del Circo Romano. km 7. Foto: organización.

      Tras un pequeño retraso tomamos la salida a golpe de cañonazo romano. Tras adelantar algunas posiciones pronto consigo correr en zona despejada visualizando la cabeza de carrera, por lo que más incentivo para no guardar fuerzas y continuar ahí delante. No me marco ningún ritmo objetivo y corro a lo que manden las piernas, y así sería durante toda la carrera: correr por sensaciones.

      Los primeros kms me salen más rápido de lo que pudiera prever antes de la carrera, pero me dejo llevar pues me siento bien. Cuando consigo encontrar mi sitio en carrera ya estamos por el puente de la Avenida Reina Sofía, a la altura del km 5. Voy corriendo sólo pero tengo como referencia, a pocos metros por delante, a un grupo de cuatro corredores al que me voy acercando poco a poco.



      Un km después, en el 6, consigo darles alcance pero en la bajada, en donde después del esfuerzo por llegar hasta ellos intento recuperar sensaciones, aceleran el ritmo y me vuelven a ganar esos metros. Aún así los tendría de referencia el resto de carrera.

       La intensidad de carrera es alta y voy muy concentrado midiendo bien las fuerzas para no "morir" antes de meta. Confío en que mis largos entrenos de maratón me garanticen aguantar los kms con la misma intensidad.  Y aunque en ningún momento de la carrera miré las pulsaciones, al finalizar y consultar los datos de carrera, pude comprobar que durante la prueba las mantuve constantes y no se dispararon salvo en las subidas. Esto quiere decir que conseguí mantener la misma intensidad aunque el ritmo fuera más bajo en los últimos kms.

Delante del Templo de Diana. km 20. Foto: organización


       El km 10 lo paso con un tiempo de 37:17. A partir de ahí el perfil de la carrera es más de sube y baja y me cuesta mantener el ritmo que tenía al principio de carrera, pero el grupo de delante no se aleja, incluso adelanto a algún corredor que se queda sin fuerzas, señal de que todos vamos igual.

          Tras el km 12 nos disponemos a cruzar el puente Lusitania y nos damos un baño de masas. Un ambiente espectacular con el público dejándose las palmas por los corredores. A mitad del puente veo a los míos dándome ánimos. 

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Compañeros del Club Atletismo Badajoz. Foto: Ana Mª y Guadalupe


       Tras alguna calle de subida llega la bajada hacia el Puente Romano. Sigo corriendo sólo, como fue desde el principio y sería hasta el final. Paso a algún que otro corredor y, al finalizar el puente y los metros posteriores, otro baño de masas que nos damos los corredores. Consigo escuchar varias veces mi nombre dándome ánimos, pero de noche y con el cansancio no consigo distinguir a nadie, pero me sirven para continuar.

        Toca subir a la parte más alta de la carrera, hasta llegar al Anfiteatro Romano. En esas subidas lo paso regular, algún corredor me ha adelantado pero yo también consigo ganar algunas posiciones. El paso por el Anfiteatro no se disfruta plenamente porque es noche cerrada y hay que correr con ojo para no tropezar con las piernas, además de que algún foco deslumbraba y dificultaba más aún correr.

Entrada en meta. Foto: Organización


             Una vez fuera del Anfiteatro ya es prácticamente el último sector de la carrera, además con perfil favorable. Consigo adelantar a un atleta más, y aunque es bajada y tengo a tiro a más corredores no tengo muchas más fuerzas para alcanzarles, así que me dejo llevar en la bajada para llegar hasta meta, a la que se llega tras curva a la izquierda, con un tiempo de 1:18:01. Posición 28º de la clasificación general y 4º de mi categoría.

        Hay algo que no termino de entender. En 13 años que llevo corriendo, históricamente esta media maratón ha tenido siempre ha sido más corta de 21 kms. Han cambiando dos veces de recorrido y pudiendo corregir este error, sigue midiendo menos de 21 kms ¿será seña de esta carrera y quieren que siga siendo así?

        Pues pasamos página y tenemos dos semanas por delante para recuperar las piernas y disputar la Maratón de Badajoz. Puede que lo de este sábado me pase factura, pero necesitaba tanto competir plenamente. Así que eso que ya me llevo y que venga lo que tenga que venir.

             A continuación dejo el track de la carrera y algunos enlaces de interés: